Después de siete años contigo, me he dado cuenta de que aún hay cosas que tengo que aprender de ti, que hay cosas que me llaman la atención y que hay cosas, que mejoran por momentos. Quizá sea por eso, que cada día estoy más enamorada de ti, porque cada es distinto al anterior, aunque sean las mismas actrices, nosotras.
Cada día descubro una anécdota diferente que hace que te quiera aún más si cabe, y siempre cabe. Algún hecho en concreto te hace recordar algo, y tu mente vuela años atrás, para contarme aquello que te pasó y que, por un momento creías que habías olvidado. Cada día, descubro alguna historia más que me hace comprender tu carácter, tu personalidad, tus cicatrices, tus victorias…
Cada día mi vida, me descubro mirándote con la misma necesidad que hace siete años, mientras tomábamos ese café y yo no paraba de mirarte a la boca, y a tu forma de pronunciar cada palabra. Tienes los labios más bonitos que jamás he visto y que jamás he besado. Quizá sea por eso, por lo que nunca me canso de hacerlo.
Cada día mi vida, siento que he acertado, que por fin he encontrado a alguien que vale la pena de verdad. He encontrado a mi compañera de vida, mi compañera de viaje, con la que compartir cualquier cosa que se me pase por la cabeza, desde locuras transitorias, hasta aventuras que no acaban. He acertado, porque nunca he sido tan feliz como lo soy ahora, siete años después. He acertado, porque tengo la suerte de compartir mi día a día con alguien que me conoce mejor que yo misma, que me quiere y que, confía más en mí de lo que yo misma soy capaz. He acertado porque con nadie me siento mejor que contigo, con nadie.
Cada día mi vida, cuenta. No es un día más, un maldito lunes más… No. Cada día tiene su misión, su lugar, su porqué… Y es hacerte feliz. No me canso de levantarme e intentar que tú día sea lo más feliz posible y que, no te canses de sonreír en todas las horas que estés despierta. Esto es pura magia, porque sé que precisamente tú, intentas lo mismo conmigo. Es el amor.
Cada día mi vida, es mejor que el anterior. Cada día nos queremos más si cabe, que cabe, nos valoramos más y nos entendemos mejor. Cada día nos necesitamos más, a pesar de ser más independientes, cada día tenemos más claro lo que queremos y luchamos por ello. Cada día lo tengo más claro.
Cada día mi vida, es un regalo. Quizá, estos siete años han pasado tan rápidos como toda mi vida anterior a conocerte a ti. Es estar contigo y el tiempo vuela. NO recuerdo si es lunes o es viernes, si comienza febrero o celebramos ya san Valentín. El tiempo vuela, cómo yo cuando te tengo cerca.
Cada día mi vida, me gustas más, me atraes más y te siento más. No me canso de hacer el amor contigo, no me canso de compartir besos enterrados bajo las mantas. No me canso de dormir todas las noches abrazada a ti y susurrarte lo mucho que te quiero. No me canso, porque es eso precisamente lo que me hace feliz y lo que me da la fuerza para poder continuar día tras día.
Cada día mi vida, cada día de estos siete años te he sentido cerca, y quizá, en parte gracias a ti, me he convertido en la persona que tienes hoy delante. Creo que soy mejor persona desde que estoy contigo. Creo que soy más paciente, más luchadora, más creyente, porque he empezado a creer en mí y en confiar un poco más en los demás… Tu me haces tantas cosas, mi vida. No solo feliz.
Cada día mi vida, es único. Cuando tu vida la compartes con el amor de tu vida, cada día es único.
¿Te vienes a comer conmigo? Prometo que después, habrá café.Después